El humo negro en las centrales petroquímicas después de un apagón es resultado del funcionamiento de los sistemas de seguridad de la planta, que dirigen los gases hacia las antorchas para su eliminación controlada.
Aunque visible, este proceso no representa un riesgo significativo para la salud ni el medio ambiente, ya que las plantas cuentan con estrictos protocolos de seguridad y medidas de control de emisiones.
Es importante comprender que la presencia de humo negro indica que los sistemas de seguridad están activos y protegiendo tanto a los trabajadores como al entorno circundante.
En resumen, el humo negro en estas circunstancias no es una emergencia ambiental, sino parte de los procesos de seguridad de la planta.